Salix eleagnos

Arbusto de hasta 6 m, de ramas muy abundantes y flexibles, que en algunos casos llega a hacerse un árbol de hasta 12 m de alto. Las ramas son pardas, pardo-grisáceas, pardo-amarillentas o de color rojo oscuro, muy resquebrajadas en los ejemplares viejos. Las hojas son simples, caducas, alternas y miden 2-16 cm de largo por 3-10 mm de ancho. Tienen forma linear o linear-lanceolada, de punta aguda y base en forma de cuña, con el margen muy finamente serrado, glanduloso y revuelto hacia el envés. Maduras son de color verde oscuro por el haz y densamente pelosas y blanquecinas o grisáceas por el envés. Las flores nacen en largos filamentos llamados amentos. Los frutos son cápsulas que se abren al madurar y liberan las semillas envueltas en un tejido algodonoso que favorece su dispersión por el viento.

Su principal uso es como mimbre, pues de las especies autóctonas es de las que proporciona las mejores varas para cestería, ya que son largas y flexibles. Además se usa como planta ornamental por el contraste y tono de sus hojas, aunque se cultiva también para restaurar cauces y fijar taludes arenosos de las riberas erosionadas.

Hay autores que consideran a los ejemplares de hojas más estrechas, de 3 a 5 mm de ancho —los más comunes en nuestro territorio—, como var. angustifolia (Poir.) C. Vicioso o subsp. angustifolia (Cariot) Rech.fil.

Esta especie figura en la legislación de las comunidades de Andalucía y Murcia con un régimen de protección especial que regula su conservación y uso sostenible.

Salix es el nombre romano de los sauces. El epíteto específico eleagnos alude al parecido de sus hojas con el árbol del Paraíso (Elaeagnus angustifolia).