Hoja con forma de aguja, larga, delgada y generalmente puntiaguda. Son propias, por ejemplo, de los pinos (gén. Pinus), enebros (gén. Juniperus, en parte), abetos (gén. Abies) y otras coníferas, o bien semejantes a las de los brezos (gén. Erica).
Estructura de tipo tumoral que la planta genera para defenderse de los insectos parásitos que depositan sus huevos en ella. La planta reacciona y forma una tumoración, de tal manera que sus tejidos envuelven y aíslan al huevo formando la agalla. El huevo eclosiona y la larva queda protegida y rodeada de un tejido blando que le sirve de alimento y protección. Después de la metamorfosis, el insecto adulto hace un agujerito por donde sale y la agalla se seca. Estas estructuras son muy diversas en formas y tamaños. Pueden aparecer en las yemas, hojas, brotes tiernos y otras partes de la planta. Son comunes en el caso de algunas especies del género Quercus, y las que tienen forma globosa a veces se llegan a confundir con los frutos, que son las bellotas (ver Quercus pyrenaica Willd.).
Planta no oriunda o no nativa de un determinado país o región, sino introducida, voluntaria o involuntariamente, por el ser humano o naturalizada en el territorio procedente de otro lugar. Es lo contrario de autóctona/o.
Hojas dispuestas espaciadamente a lo largo del tallo, de forma que por cada nudo hay una sola hoja y cada una se dispone en sentido opuesto a la anterior.
Conjunto de flores que forman normalmente un racimo o espiga de flores apretadas. Suelen ser colgantes y unisexuales (masculinas o femeninas) y sin pétalos. Son propias, por ejemplo, de los sauces (gén. Salix), álamos (gén. Populus), alisos (gén. Alnus), avellanos (gén. Corylus), abedules (gén. Betula) o castaños (gén. Castanea).
Fruto seco con una sola semilla en su interior que no se abre al madurar para liberarla, como en el carpe (Carpinus betulus). Los frutos del plátano de paseo (gén. Platanus) forman una bola compuesta de muchos aquenios (poliaquenio).
Cubierta carnosa que recubre parcialmente la semilla y forma una estructura semejante a un fruto, aunque no lo sea. En el caso del tejo (Taxus baccata) es de un color rojo vivo.
Planta oriunda o nativa de un determinado país o región. No incluye a las plantas introducidas o naturalizadas. Es lo contrario a alóctona/o.
Fruto carnoso rodeado por una delgada piel y con una pulpa jugosa en su interior, como los del laurel (Laurus nobilis).
Relativo a la hoja formada por varias hojuelas (folíolos) a ambos lados de un eje principal (rabillo). Cuando esta estructura se vuelve a dividir, es decir, se repite dos veces, la hoja es bipinnada. Entonces hay un eje principal y ejes secundarios con las hojuelas. Equivale a dos veces pinnada. Este tipo de hoja es propia, por ejemplo, de muchas acacias (gén. Acacia), de la acacia de tres espinas (Gleditsia triacanthos) o del cinamomo (Melia azedarach).
Fruto algo carnoso y de color rosado, con forma de sombrero de cuatro picos, como el utilizado antiguamente por los eclesiásticos. Es característico de los boneteros (gén. Euonymus).
Hoja modificada que acompaña a las flores, frutos, yemas, hojas verdaderas u otro órgano de la planta. Suelen ser de menor tamaño que las hojas normales. Por ejemplo, las flores de los tilos (gén. Tilia) llevan una bráctea en forma de lengüeta muy característica.
Relativo a los órganos poco duraderos, como las hojas que muchos árboles pierden en el otoño o invierno.
Plantas que no conservan las hojas durante todo el año, ya que las pierden en el otoño o invierno.
Fruto seco que se abre al madurar para liberar las semillas de su interior, como en los eucaliptos (gén. Eucalyptus), los bojes (gén. Buxus) o en el tabaco moruno (Nicotiana glauca).
Hojas modificadas que se pliegan dando lugar a unas cavidades cerradas, que son los ovarios de la flor, dentro de los cuales se formarán los óvulos.
Pelos finos a modo de pestañas que se forman en el contorno de algunas estructuras de las plantas. Las hojas del haya (Fagus sylvatica) y los frutos del olmo temblón (Ulmus laevis) tienen cilios en sus contornos y por tanto serían ciliados.
Relativo a la hoja formada por una serie de hojuelas (folíolos) alrededor de un eje principal o rabillo. Las hojuelas no tienen una yema axilar en la base del rabillo, sino que ésta se encuentra en la unión del eje principal, que agrupa todas las hojuelas, con el tallo o rama.
Relativo a la hoja de consistencia fuerte pero flexible, que recuerda al cuero, como en las encinas (Quercus ilex), el laurel (Laurus nobilis), el madroño (Arbutus unedo) o los eucaliptos (gén. Eucalyptus).
Relativo a la hoja cuyo margen tiene dientes romos en forma de ondas pequeñas. No confundir con la lámina cuando es ondulada.
En un árbol es la capa superior de sus hojas. Es un factor ecológico importante porque protege el suelo de vientos y tormentas, y proyecta una sombra que influye directamente en el desarrollo de las plantas que viven debajo.
Relativo a la hoja cuyo margen es completamente liso, sin dientes, picos u otro tipo de hendidura.
Cara inferior de las hojas, que por lo general es de color más claro que la cara superior o haz.
Provisto de un escote o pequeña hendidura en la punta de la hoja, como en el abeto común (Abies alba).
Planta que se establece y reproduce sin la intervención humana (es lo contrario a planta cultivada). No debe confundirse con autóctono, ya que las especies naturalizadas son espontáneas, pero no autóctonas. Se dice subespontánea/o a la planta que, al escaparse o liberarse en espacios naturales, se establece y reproduce sin intervención humana, dando lugar a pequeñas poblaciones poco viables, incapaces de prosperar.
Estambre. Cada uno de los elementos alargados que forman el órgano masculino de la flor. Suele estar formado por un filamento en cuya parte superior están las anteras, que contienen el polen.
Rabillo de la hoja ensanchado, que en las acacias (gén. Acacia) tiene aspecto de hoja y cumple la misma función (fotosíntesis). No es una hoja verdadera y no tiene yema axilar.
Estructura que en las plantas con flor (angiospermas) se forma a partir de la flor fecundada. Puede ser seco o carnoso y contiene las semillas en su interior. En las gimnospermas (pinos —gén. Pinus—, abetos —gén. Abies—, tejos —Taxus baccata—, etc.) no se forman verdaderos frutos y las semillas se encuentran dentro de unas estructuras que se denominan falsos frutos, como son las piñas de los pinos (gén. Pinus), los gálbulos de los enebros (gén. Juniperus, en parte) o el arilo carnoso de los tejos (Taxus baccata).
Falso fruto carnoso y redondeado, característico de enebros y sabinas (gén. Juniperus), que no se abre al madurar y contiene unas pocas semillas.
Célula o conjunto de células que acumulan y secretan sustancias. Algunas especies de prunos (gén. Prunus) tienen un par de glándulas en el rabillo de la hoja. También las especies de tarajes (gén. Tamarix) presentan glándulas a modo de papilas, que acumulan y secretan las sales que la planta ha absorbido del suelo. Glanduloso quiere decir ‘con glándulas’.
La grafiosis es una enfermedad que ataca a los olmos (gén. Ulmus). Está producida por un hongo del género Ophiostoma y se transmite a través de escarabajos de la familia de los escolítidos. En la fase adulta estos insectos horadan la madera para depositar sus huevos y dejan las esporas del hongo, que llevan pegadas a su cuerpo. Éstas germinan, el hongo crece y colapsa los canales conductores de la savia, lo que termina causando la muerte del árbol.
Cara superior de las hojas, que por lo general es de color más vivo que la cara inferior o envés.
Hoja compuesta con un número impar de hojuelas (folíolos), que suelen estar en pares enfrentados a lo largo del eje principal o rabillo y rematados por una hojuela final.
Conjunto de flores. A veces el conjunto puede parecer una flor simple, aunque en realidad está formada por un grupo de ellas.
Planta que ha sido introducida voluntaria o involuntariamente por el ser humano fuera de su área de distribución natural y que se ha naturalizado, resultando dañina para otras especies autóctonas o propias de esa región.
Relativo a la hoja con forma de punta de lanza, es decir, elíptica y alargada, que se estrecha en ambos extremos.
Líquido de aspecto lechoso que presentan algunas plantas, como las higueras (Ficus carica) y algunos arces (gén. Acer), y que se puede observar al partir una hoja o ramilla.
Tipo de hoja que permite a las plantas regular el exceso de humedad ambiental para realizar sus procesos de transpiración y respiración correctamente. Toma su nombre del laurel (Laurus nobilis), que gracias a la capa de cera que la recubre es capaz de repeler el agua, a la vez que favorece el goteo su extremo terminado en una punta aguda.
Fruto seco característico de las leguminosas (fam. Leguminosae). Está formado por dos láminas o valvas, en muchas ocasiones alargadas, y en cuyo interior se disponen las semillas.
Relativo a la hoja que es muy alargada con los bordes casi paralelos, como las de los tejos (Taxus baccata).
Partes redondeadas y salientes en el margen de algunas hojas u otras partes de la planta, como las de robles (gén. Quercus, en parte), arces (gén. Acer, en parte), majuelos (gén. Crataegus), higueras (Ficus carica), plátanos (gén. Platanus) y serbales (gén. Sorbus, en parte). No confundir con la lámina cuando es ondulada.
Borde o contorno de la hoja, que puede ser entero, crenado, dentado, lobulado, serrado, sinuado, etc.
Se aplica a las plantas con flores que contienen néctar y que las abejas utilizan para producir miel.
Especie basada únicamente en caracteres morfológicos. Es una agrupación artificial de individuos que puede resultar práctica, pero requerirían de análisis más profundos (microscópicos, cuantitativos, genéticos, etc.) para asegurar que estamos ante especies distintas o no.
Planta que ha sido introducida voluntaria o involuntariamente por el ser humano fuera de su área de distribución natural y prospera en él como si fuese autóctona.
Relativo a la hoja con forma de huevo invertido, es decir, con la parte ancha hacia la punta.
Relativo a la hoja cuya lámina no tiene la superficie plana sino que forma ondas pequeñas. No confundir con margen sinuado, crenado o lobulado. Las hojas del haya suelen ser onduladas.
Hojas dispuestas una enfrente de la otra a lo largo del tallo, de forma que por cada nudo hay dos hojas enfrentadas que parten del mismo punto.
Lóbulos que se presentan en la base de la hoja y que se suelen diferenciar del resto de posibles lóbulos de la misma, por estar más separados y ser diferentes. Es característico del roble carballo (Quercus robur).
Protuberancia presente en la superficie de hojas u otros órganos con forma de dedito corto. En los tarajes (gén. Tamarix) suelen ser pequeñas glándulas secretoras de sal.
Hoja compuesta con un número par de hojuelas (folíolos), que suelen estar en pares enfrentados a lo largo del eje principal o rabillo.
Plantas que mantienen las hojas verdes durante todo el año, como los pinos (gén. Pinus), encinas (Quercus ilex) o laureles (Laurus nobilis). Esto se debe a que no pierden sus hojas viejas antes de haberse producido las nuevas.
Hoja de las plantas que permanecen verdes todo el año, como en los pinos (gén. Pinus) o en las encinas (Quercus ilex). El hecho de que un árbol conserve su follaje durante la estación seca o fría, da motivo para calificar las hojas de persistentes, pero no para considerarlas como perennes.
Hoja modificada de la flor que está por encima de los sépalos. Suele ser muy fina y de distinto color a las hojas verdaderas.
Falso fruto de las coníferas (pinos —gén. Pinus—, abetos —gén. Abies—, etc.) formado por una estructura leñosa con un eje central, alrededor del cual se disponen una serie de escamas que encierran a las semillas (piñones). El aliso (Alnus glutinosa) tiene un fruto que recuerda a una piña de conífera, pero mucho menor (2 cm). Cuando las pequeñas semillas aladas son liberadas, los conos permanecen en el árbol, a menudo durante todo el invierno.
División o rama primaria de una hoja compuesta. También se llama así a cada una de las hojuelas (folíolos) de una hoja compuesta.
Relativo a la hoja compuesta formada por varias hojuelas (folíolos). Una hoja pinnada está formada por pinnas dispuestas a ambos lados de un eje principal o rabillo.
Fruto carnoso que no se abre al madurar, de forma redondeada o piriforme y con varias pepitas en su interior, como en los manzanos (gén. Malus), perales (gén. Pyrus), majuelos (gén. Crataegus) y serbales (gén. Sorbus).
Recubrimiento céreo que confiere a las hojas, frutos u otros órganos una capa opaca y blanquecina.
Se dice de una especie que constituye una verdadera ‘reliquia’ de la flora, es decir, que se trata de una especie evolutivamente muy antigua y que estuvo más extendida en el pasado. Frecuentemente este tipo de especies se encuentra en declive o en vías de extinción.
Fruto seco, que no se abre al madurar (aquenio) y provisto de un ala membranosa que facilita su dispersión por el viento. Es propio de los arces (gén. Acer), los fresnos (gén. Fraxinus), los olmos (gén. Ulmus) o del árbol del cielo (Ailanthus altissima).
Cualquier órgano (hoja, flor, fruto, etc.) que crece sin un rabillo, directamente sobre la ramilla o tronco.
Relación que se establece entre dos especies distintas, de forma temporal o permanente, en la que ambas resultan beneficiadas.
Relativo a la hoja cuya lámina no se encuentra dividida en hojuelas (folíolos) y en la que normalmente se puede ver una yema axilar en la base del rabillo, es decir, en la unión del eje principal con el tallo o rama.
Relativo a la hoja cuyo margen tiene senos u ondas poco profundas. No confundir con la lámina cuando es ondulada.
Pelos suaves, a modo de fieltro, que recubren los órganos de algunas plantas, como los frutos del almendro (Prunus dulcis) o algunas hojas por una o las dos caras.
Líquido casi incoloro o ambarino de olor característico que se obtiene de la destilación de la resina de diversas especies de coníferas y otras plantas aromáticas como el terebinto (Pistacia terebinthus). Es usada como disolvente de pinturas, materia prima para la fabricación de compuestos aromáticos sintéticos y algunos desinfectantes.
Cada una de las partes en las que se dividen algunos frutos, como las legumbres (fam. Leguminosae).
Disposición de tres o más hojas, flores, etc., que nacen a un mismo nivel del eje o tallo, de forma que por cada nudo hay más de dos hojas, etc., como en el caso de los brezos (gén. Erica) o los enebros (gén. Juniperus, en parte); (ver opuesta y alterna).