Euonymus europaeus
Bonetero, evónimo
Bonetero, evónimo, husera (cast.); matapoll, evònim, barretets de capellà (cat.); basaerramua (eusk.); fuseira (gall.); bonete-de-preste (port.); spindle, European spindle, common spindle (ing.).
Autóctona
¿SABÍAS QUE…? Los frutos de este arbolito se parecen mucho a los bonetes y bonetero significa ‘portador de bonetes’, que son los sombreros de cuatro picos redondeados que llevaban antiguamente los eclesiásticos.
El bonetero es un arbusto o pequeño arbolito que alcanza los 6 m de altura, de ramillas jóvenes verdosas y grisáceas al madurar. Al cortarlas se observa que nos son cilíndricas del todo, sino que tienen una sección angulosa en cuatro lados (cuadrangulares). Las hojas son caducas, simples, opuestas, de forma elipsoidal u ovado-lanceoladas, de 6-11 cm de largo por 1-4 cm de ancho. El margen es ligeramente serrado o dentado, pero es algo que no se ve bien a simple vista y pueden pasar por enteras. Las flores son verdosas y poco aparentes, pero el fruto es espectacular. Tiene forma de bonete de color rosado y en su interior las semillas muestran una capa de intenso naranja que se deja ver porque el fruto se abre al madurar.
ECOLOGÍA
El evónimo nunca aparece formando bosques sino que es una especie acompañante de los de hoja caduca, a menudo formando parte de las orlas arbustivas naturales y como componente de setos o bocages. Suele estar asociado a cursos de agua, valles y ambientes húmedos de las montañas. Necesita suelos bien desarrollados, crece mejor en los calizos y en exposiciones de buena luz, aunque soporte condiciones de media sombra. Se distribuye desde el nivel del mar hasta los 1500 m.
DISTRIBUCIÓN
Es una planta oriunda de Europa y del sudeste de Asia. En la Península es más abundante en su mitad norte asociada a las zonas montañosas.
Tiene una madera blanquecina o amarillenta muy resistente y dura, que es muy valorada para hacer carbón vegetal como componente de la pólvora o como carboncillo para dibujo. Antiguamente era muy apreciada para confeccionar agujas de calceta y los husos de las ruecas, de ahí algunos de sus nombres comunes de husera, huseda, fusera (asturleonés) o fuseira (gallego). En este sentido nos cuenta Oria de Rueda la siguiente copla asturleonesa que, traducida, dice: «¡Para hilar bien el lino / en el modo de nuestra tierra / haz girar rápido el huso / que es de madera de husera!». Es una planta muy venenosa. Hay que tener mucho cuidado de no ingerir sus atractivos y vistosos bonetes, si bien sus frutos se usaron desecados y pulverizados para matar piojos —de ahí matapiejos y matapoll (catalán)— y el cocimiento de la corteza y hojas para curar la sarna.
Flora iberica incluye en la Península el Euonymus latifolius (L.) Mill., muy escaso y localizado en la Sierra de Cazorla, Montes Universales y Sierra de Javalambre. Suele presentarse como arbusto y sólo en ocasiones alcanza el porte de árbol.
El bonetero aparece en el catálogo de especies amenazadas de Castilla-La Mancha.
Euonymus procede del griego
euónymos,
eû (bueno, verdadero) y
ónyma (nombre), es decir, ‘de buen nombre’. Sin embargo, irónicamente es una planta considerada en la Antigüedad como de mal agüero. El epíteto
europaeus quiere decir ‘de Europa’.